Una vuelta por los campos de golf.
El país cuenta con 17 campos de golf
repartidos por todo el conjunto de su territorio. Muy de moda,
el golf es un deporte
en pleno apogeo. Es posible realizar
cuatro circuitos, más o menos largos, para combinar la práctica
de este deporte…
con el descubrimiento de las
diferentes regiones marroquíes.
El circuito Prestige.
Incluye
nueve campos de golf y un bucle que parte de Rabat, para pasar por
Fez y Meknes
y descender hasta El Jadida para
seguidamente ascender por la costa atlántica a través
de la zona de influencia de Casablanca,
Mohammedia y Bouznika. Mención especial merecen
las ruinas romanas del Royal Golf Dar Es
Salam de Rabat, campo donde se disputa el célebre

Trofeo Hassán-II. El de Fez le encantará
por su agradable olivar. Para jugar rodeado por paisajes
inolvidables puede elegir entre Meknes, donde las murallas de la
ciudad imperial se asoman al recorrido, El Jadida y sus hoyos frente
al océano o el Royal Golf de Anfa, con la mezquita Hassán-II como
telón de fondo.
El circuito Mediterráneo.
A los pies del Rif, tres recorridos permiten descubrir las ciudades
de Tánger y Tetuán, así como la estación
balnearia de Tamuda Bay
(a 15 kilómetros de Tetuán). Destacar
que el campo de golf de Tánger, reputado por sus vistas sobre el
estrecho, cultiva un simpático carácter british.
El circuito Atlas.
Estos tres campos de golf, Palmeraie Golf Club, Amelkis y el Royal
Golf, tienen dos puntos en común: las montañas nevadas del Gran
Atlas en el horizonte y su ubicación en los alrededores de
Marrakech.
El circuito Sol.
Agadir cuenta con tres campos de golf en sus inmediaciones:
Royal Golf de Agadir, Les Dunnes y el
bien llamado Golf du Soleil; gracias al clima local, permanecen
abiertos durante todo el año.
Recordar.
Los golfistas tendrán motivos para sentirse pletóricos de felicidad
en cualquier parte de Marruecos y apreciarán
los marcos de belleza incomparable donde
se han diseñado los campos. |